Te
perdí
en
una oscura noche
mientras
dormía.
En
sueños
caminé a tientas
entre
besos olvidados,
mudas
palabras de amor,
miradas
ciegas
para
descubrir que no éramos,
que
no seríamos.
Y
al volver a abrir los ojos,
no
vi nada
salvo
el insobornable silencio
de
la ausencia.
Había
despertado del amor
y
supe
que
estaba en
el
infierno,
pues
te recordaba.